La base del método científico consiste en la verificación de la hipótesis formulada en torno al fenómeno observado; para lograr esto es indispensable que dicho fenómeno se replique y que en la réplica se comprueben los efectos que se han predicho que sucedan; por esta razón el trabajo experimental es uno de los pilares de las ciencias.
Incluso, desde el enfoque cualitativo, que no estima hipótesis, sino que trabaja sobre los fenómenos directamente, el trabajo experimental es imprescindible, pues de otro modo no se podrían percibir y transformar los ámbitos de estudio, así pues el trabajo experimental también cumple una función importante en la observación y recopilación de información.
En conclusión, el trabajo científico es importante para las ciencias, sea desde un enfoque cuantitativo, para verificar la hipótesis, o desde uno cualitativo, para maximizar el desempeño de la observación.
