Obtén respuestas rápidas y precisas a tus preguntas en Revelroom.ca, la mejor plataforma de Q&A. Descubre soluciones completas a tus preguntas con la ayuda de profesionales experimentados en nuestra amigable plataforma. Encuentra soluciones detalladas a tus preguntas con la ayuda de una amplia gama de expertos en nuestra amigable plataforma de preguntas y respuestas.
Sagot :
¡Salve, oh
patria! es el Himno Nacional de la República del Ecuador. Consta de 6 estrofas y un coro, de las cuales
únicamente se cantan la segunda estrofa y el coro.
CORO
• Empieza con un saludo a la manera romana: "Salve oh patria, mil veces, oh patria, gloria a tí".
• Para luego describir a Ecuador como una tierra de paz y felicidad: "Ya tu pecho reboza, gozo y paz".
• Acto seguido, elude al sol equinoccional y las
antiguas creencias. prehispánicas de adoración del sol, cuando afirma: "Y
tu frente radiosa, más que el sol contemplamos lucir".
PRIMERA ESTROFA
“Indignados tus hijos del yugo
que te impuso la ibérica audacia,
de la injusta y horrenda desgracia
que pesaba fatal sobre ti,
santa voz a los cielos alzaron,
voz de noble y sin par juramento,
de vengarte del monstruo sangriento,
de romper ese yugo servil.”
El marcado tono antiespañol empieza en la primera estrofa, que al referirse a los tiempos coloniales, dice: "la injusta y horrenda desgracia, que pesaba fatal sobre tí". Varias estrofas están escritas con este acento antiespañol, pero no hay en el Himno ninguna alusión directa a las culturas prehispánicas, sino exclusivamente a las guerras de la Independencia.
SEGUNDA ESTROFA
“Los primeros los hijos del suelo
que, soberbio, el Pichincha decora
te aclamaron por siempre señora
y vertieron su sangre por ti.
Dios miró y aceptó el holocausto,
y esa sangre fue germen fecundo
de otros héroes que, atónito, el mundo
vio en tu torno a millares surgir.”
Se alude a los próceres del Diez de Agosto, quienes son identificados como "los primeros, los hijos del suelo que soberbio el Pichincha decora" (este suelo es Quito). Se hace también una alusión al 2 de agosto de 1810, cuando los españoles masacraron al pueblo sublevado de Quito: "y vertieron su sangre por ti./ Dios miró y aceptó el holocausto/ y esa sangre fue germen fecundo/". La alusión se extiende luego a los ecuatorianos de otras ciudades, como Guayaquil y Cuenca, que se sumaron posteriormente al proceso de la Independencia: "de otros héroes que, atónito el mundo/ vio en tu torno a millares surgir."
TERCERA ESTROFA
"De estos héroes al brazo del hierro
nada tuvo invencible la tierra,
y del valle a la altísima sierra
se escuchaba el fragor de la lid.
Tras la lid, la victoria volaba,
libertad tras el triunfo venía,
y al león destrozado se oía
de impotencia y despecho rugir"
Describe poéticamente la Batalla del Pichincha, en donde ecuatorianos de todas las regiones y americanos de varios países derrotaron finalmente a los españoles y pusieron fin a la Real Audiencia de Quito. La batalla, que tuvo lugar en las faldas del volcán Pichincha, es rememorada con estos versos "De esos héroes al brazo de hierro/ nada tuvo invencible la tierra/ y del valle (alude a la Costa) a la altísima sierra, se escuchaba el fragor de la lid".
El carácter libertario de la Batalla se recuerda de esta forma: "tras la lid la victoria volaba/ libertad tras el triunfo venía/ y al león (que representa a España) se oía / de impotencia y despecho rugir".
CUARTA ESTROFA
"Cedió al fin la fiereza española,
y hoy, oh Patria, tu libre existencia
es la noble y magnífica herencia
que nos dio el heroísmo feliz.
De las manos paternas la hubimos,
nadie intente arrancárnosla ahora,
ni nuestra ira excitar vengadora
quiera, necio o audaz, contra sí."
Recuerda el legado de libertad de la independencia, y, frente a la nueva agresión hispana, advierte sobre la disposición de los ecuatorianos de defender, entonces y por siempre, su soberanía: "hoy, ¡oh Patria!, tu libre existencia/es la noble y magnífica herencia /que nos dio el heroísmo feliz / nadie intente arrancárnosla ahora / ni nuestra ira excitar vengadora / quiera, necio o audaz, contra sí.
QUINTA ESTROFA
"Nadie, oh Patria, lo
intente. Las sombras
de tus héroes gloriosos nos miran,
y el valor y el orgullo que inspiran
son augurios de triunfos por ti.
Venga el hierro y el plomo fulmíneo,
que a la idea de guerra y venganza
se despierta la heroica pujanza
que hizo al fiero español sucumbir."
Reitera la desafiante postura del Ecuador frente al intento español de reconquista: "Venga el hierro y el plomo fulmíneo /que a la idea de guerra y venganza/se despierta la heroica pujanza /que hizo al fiero español sucumbir".
SEXTA ESTROFA
"Y si nuevas cadenas prepara
la injusticia de bárbara suerte,
¡gran Pichincha! prevén tú la muerte
de la Patria y sus hijos al fin;
Hunde al punto en tus hondas entrañas
cuanto existe en tu tierra, el tirano
huelle solo cenizas y en vano
busque rastro de ser junto a ti"
Presenta una invocación a las volcanes ecuatorianos, representados por el Pichincha, para que, en caso de una invasión extranjera, destruyan el país para que el invasor no pueda apropiarse de él. "Y si nuevas cadenas prepara / la injusticia de bárbara suerte/¡gran Pichincha! prevén tú la muerte/de la Patria y sus hijos al fin;/ hunde al punto en tus hondas entrañas/cuanto existe en tu tierra, el tirano/huelle solo cenizas y en vano/busque rastro de ser junto a ti".
Respuesta:
Explicación:
Venga el hierro y el plomo fulmineo/ que a la idea de guerra y venganza / se despierta la heroica pujanza
Gracias por elegir nuestro servicio. Nos comprometemos a proporcionar las mejores respuestas para todas tus preguntas. Vuelve a visitarnos. Esperamos que esto te haya sido útil. Vuelve cuando quieras para obtener respuestas más precisas e información actualizada. Visita Revelroom.ca para obtener nuevas y confiables respuestas de nuestros expertos.