Los empleados "privados" debemos considerar nuestra jubilación con el mismo cuidado e intensidad con los que los políticos buscan el próximo "hueso".
El webmasterLa experiencia de nuestros ancianitos es la de haber perdido la juventud en un país ingrato que los tiene condenados a la miseria.
Alvaro CuevaEs fácil tomar decisiones cuando las reglas no se le aplican a uno. Ningún miembro del gobierno tiene que preocuparse por su pensión o su atención médica.
Charles von RavenswaayLuis Víctor Jiménez Ramos. 62 años, jubilado el 31 de diciembre de 1998 y con una pensión de $2,029.85 mensuales, desde febrero 22 de 1999. Comenzó a cobrarla en abril de 1999 en Banco Inverlat de Plaza del Sol. El 12 de junio de 2002, le informaron de su último cobro ahí.Tendría que ir a la clínica del IMSS de Las Aguilas para gestionar nueva modalidad. Fue y luego de hacer fila durante 50 minutos, recibió una carta para abrir una cuenta de "nómina inmediata" en Inverlat, Bancomer o Banamex.Hizo el trámite, pero la empleada de la ventanilla de pensionados le informó que, por única vez, tendría que cobrar en la Clínica 51. El 3 de julio, de nuevo en la clínica, a las 8:45 horas. El módulo de información estaba cerrado. Preguntó al policía que cuidaba la puerta si ahí podía cobrar. No, ahí no, tendría que acudir a Inverlat de Avila Camacho. Llegó a las 9:10 y resultó que un letrero en la ventanilla decía que el pago sería de 10:00 a 15:00 horas. Como había larga fila de pensionados en espera, un par de horas de pie, bajo el rayo del sol, fue el precio para recibisr sus $ 2,029.85. Pero eso no fue todo. Otra vez, en la ventanilla, nuevo papelito para informar que el próximo pago será entre el 2 y el 5 de agosto en la Clínica 51. Con toda razón el Sr. Jiménez se pregunta: ¿De qué se trata? ¿Por qué dejó el Seguro de pagarme en el banco más cercano a mi casa? ¿Por qué traer a los pensionados de Herodes a Pilatos? Muchos, viejos y enfermos, ya no pueden andar de arriba para abajo causando lástimas durante horas, como si fueran a pedir limosna. Es inhumano y denigrante por parte del IMSS el trato que da a los pensionados. ¿Por qué tenemos que ser discriminados en los bancos, como si no fuéramos clientes que dejamos dinero? ¡No se vale!No es limosna lo que el IMSS nos da, aunque por su monto, algunas pensiones parecería que sí lo son. Es una prestación ganada durante años de pagar cuotas. ¿No podría el IMSS mandar a una trabajadora social cada determinado tiempo a comprobar en el domicilio del pensionado si todavía vive?Relatado en la sección "ni más ni menos" del Sr. Marcos Arana Cervantes en la pág. 3-B del periódico El Informador del 17 de julio de 2002.Comentario del webmaster:Al Sr. Jiménez en realidad le fue bien. Hace unos meses este problema fue crítico cuando a los pensionados los hacían estar parados varias horas esperando el pago de su dinero, en alguna de las clínicas del IMSS, para salirles finalmente con que el dinero se había terminado, o que el "Servicio Panamericano de Protección" (camiones blindados) no había llegado con el mismo, por lo que tendrían que regresar otro día.Una cosa no acabo de comprender: si organizaciones mafiosoides se unen para proteger intereses ilegales (automóviles de contrabando, robo de energía eléctrica, etc.) ¿por qué los pensionados, que son miles, no han logrado organizarse? Es cierto que muchos están enfermos, pero muchos no lo están y tienen todo el tiempo del mundo para dedicarlo a una organización así, lo que además les daría una ocupación en que se sentirían útiles a ellos mismos y a su comunidad.Una organización de este tipo podría empezar por exigirles a los políticos soluciones "¡Hoy, hoy, hoy!". Nada de promesas para cuando lleguen al poder... esas promesas son olvidadas en cuanto termina el día de las elecciones. El político o el partido que obtendrá el apoyo de los jubilados como grupo será el que les dé soluciones ahora... "¡Ya!". Y si no existe ese político o ese partido, pues fundar uno (en Israel existe un Partido de Jubilados.). Al fin y al cabo, además de ellos, pueden contar con muchos de sus familiares y con todos los que estén por llegar en el corto plazo a su jubilación. Y también, por qué no, con todos los demás que a mediano o largo plazo, en caso de seguir vivos, nos encontraremos en su situación.Señores y señoras jubilados y pensionados, si lo que reciben parece una limosna, se debe a que los fondos que ustedes generaron durante toda una vida trabajando fueron y siguen siendo robados por el gobierno, la institución a la que estaban afiliados y los pensionados "públicos". Pensionados "públicos" llamo a aquellos que trabajaron para el gobierno y que entre sus
