Respuesta:
Para muchos filósofos y sofistas, el conocimiento verdadero se basa en la percepción sensible, ¿pero es realmente confiable el conocimiento que nos proporcionan los sentidos? Este tema ya había sido abordado por los filósofos presocráticos y se sabe que aún no se ha probado científicamente de dónde proviene el verdadero conocimiento, si de la razón, o de los sentidos.
Lo sensible es lo que proviene de los 5 sentidos: vista, olfato, tacto, oído y gusto. Lo racional, es lo que proviene de nuestra mente, la razón se encuentra en la mente; por lo que los conceptos sensible y racional son divergentes. La razón es la capacidad de la mente humana para establecer relaciones entre ideas o conceptos y obtener conclusiones o formar juicios. Se entiende por sensación, el conocimiento proveniente de la experiencia por el cual captamos determinadas cualidades y características de las cosas a través del uso de los sentidos.
Según Platón, la verdad no puede estar sometida a lo sensible ya que los datos sensibles son procedentes de un mundo en constante cambio y devenir. Así como el ser para Platón es inmutable, el conocimiento debe serlo también.
Debido a que el mundo sensible es cambiante, se obtiene un conocimiento subjetivo y por lo tanto, de él solo alcanzamos a tener una opinión o doxa que no está sujeta a una comprobación para certificar su validez.
Las sensaciones son fuente de opinión y estas pueden ser variables y al mismo tiempo falsas, por lo que confiar absolutamente del conocimiento proporcionado por los sentidos no constituye un verdadero conocimiento. Este conocimiento sensible es relativo a cada ser humano y depende de su cosmovisión.
El conocimiento intelectual o racional surge como un pensamiento que se basa en un mundo de ideas. Este conocimiento intelectual, utiliza el método de la dialéctica, que según Platón, es la explicación definitiva del conocimiento.
Para afirmar que un conocimiento es verdadero se debe tomar en cuenta que: las ideas son únicas, eternas, inmutable e inmateriales y que la percepción sensible es múltiple, perecedera, cambiante y material.
