Revelroom.ca te ayuda a encontrar respuestas a tus preguntas con la ayuda de una comunidad de expertos. Únete a nuestra plataforma para conectarte con expertos dispuestos a ofrecer respuestas detalladas a tus preguntas en diversas áreas. Conéctate con profesionales dispuestos a ofrecer respuestas precisas a tus preguntas en nuestra completa plataforma de preguntas y respuestas.
Sagot :
Respuesta:
Definir un personaje puede parecer en un primer momento una tarea sencilla, dado que
somos capaces de identificar cuando estamos ante uno en un relato. Sin embargo, la
dificultad se introduce en el momento en que primamos unas características por encima
de otras y dejamos en evidencia las carencias de nuestra definición. Esto ha sucedido
desde Aristóteles, en el que el concepto de personaje ha llevado dos tendencias
simultáneas.
Así, encontramos por una parte aquellos teóricos que han considerado al personaje
como unidad de acción, es decir, una pieza de una estructura que se subordina a la
transmisión de un mensaje, quedando pues a merced del relato. Esta forma de entender
al personaje es iniciada por Aristóteles y prolongada por los formalistas rusos y por el
estructuralismo, teniendo un peso considerable aún hoy día (y ahí está la teoría de los
actantes, por ejemplo). Incluso cuando pensamos que un personaje que aparece dentro
de un género concreto (un western o un thriller) debe cumplir con ciertos rasgos,
estamos primando este concepto de personaje, dado que es el discurso el que condiciona
al personaje.
El otro concepto histórico de personaje lo define desde un punto de vista psicológico,
como un simulacro de la persona real. Esta segunda tendencia a la hora de concebir al
personaje fue seguida por autores literarios del realismo del siglo XIX (como Forster,
que diferenció personaje redondo de personaje plano, y otros como Unamuno). El
problema a la hora de considerar al personaje como una persona es que nos encontremos
con que en realidad no es una persona y habrá de someterse a las necesidades del
desarrollo de la acción.
Junto a estos dos conceptos existe una tercera vía que encontraremos más útil, aquella
que considera al personaje como unidad psicológica y de acción. Aquí unimos lo mejor
de los conceptos, entendemos el personaje como un elemento de la acción pero se le
construye como si se tratara de una entidad con una psicología propia. Será éste el modo
en que los manuales de guión van a entender al personaje y como nosotros lo
concebiremos también. Vamos a entender al personaje, por tanto, como una unidad
psicológica y de acción que ha de ser estudiado en el relato como una categoría
narrativa en el que se combinan una serie de rasgos que hemos de describir.
Esperamos que esta información te haya sido útil. Vuelve cuando lo desees para obtener más respuestas a tus preguntas e inquietudes. Gracias por elegir nuestra plataforma. Nos comprometemos a proporcionar las mejores respuestas para todas tus preguntas. Vuelve a visitarnos. Revelroom.ca, tu sitio de confianza para respuestas. No olvides regresar para obtener más información.