Respuesta:
Las personas que padecen este complejo, que por lo visto es normal en nuestro desarrollo infantil, es visto por los demás como un sentimiento de amor/odio hacia los padres.
Explicación:
En los adultos se demuestra en una atención exagerada hacia la madre, un hacerla/tenerla como superior y más cercana, llegando a ser la dependencia hacia esta obsesiva hasta el punto de no tomar ninguna decisión sin haberlo consultado con la madre.
En literatura todos conocemos las circunstancias de este héroe de Tebas, Sófocles lo transmitió bien y en sus obras plasmó a una sociedad que no encontraba solución a sus males y buscó quien pagase por ellos.
Sigmund Freud baso su teoría del psicoanalisis en este complejo.