La palabra literatura viene del latín ―littera‖, que significa letra. Aunque el origen de la literatura fue primero oral: las obras cantadas o recitadas ocuparon gran espacio en las épocas antigua y medieval, sólo una parte ínfima ha llegado hasta nosotros. Para que fuera escrita hubo de producirse la escritura, es decir, la perpetuación de la palabra a través del tiempo. La historia de la literatura es el testimonio de esos milagros, que consisten en apresar el espíritu de cualquier época y transmitirlo a la posteridad por medio de sonidos o de trazos escritos. Leyendo y estudiando las obras más representativas realizadas por el hombre a lo largo de la historia, a sus autores, sus temas, las corrientes o movimientos más significativos, podremos conocer cómo han vivido