MENTE SANA EN CUERPO SANO
El ser humano es una unidad indivisible de cuerpo y mente. Por ello se debe procurar que tenga un
desarrollo integral y equilibrado a través de la práctica del deporte y de los ejercicios físicos. Estas
actividades proporcionan al individuo un cuerpo sano, resistente ágil, indispensable para el trabajo y
para su propio bienestar.
El ejercicio físico mejora el ritmo respiratorio, acelera la circulación, aumenta la elasticidad toráxica,
tonifica el sistema nervioso, vigoriza el corazón, disminuye el tejido adiposo y estimula el crecimiento.
La falta de ejercicio atrofia los órganos y genera enfermedades.
En el aspecto síquico, la práctica del deporte fortalece la voluntad, favorece el desarrollo de la
inteligencia, disciplina los sentimientos, aleja de los vicios, proporciona optimismo y sana alegría.
A nivel social hace posible la formación de pueblos fuertes y diestros. El deporte bien dirigido lleva al
ejercicio de virtudes sociales: respeto, lealtad, optimismo, obediencia, etc. Prepara para la patria
ciudadanos vigorosos, disciplinados, ágiles y dispuestos a defenderla, en caso de peligro.
Debe, pues, practicarse deporte por los numerosos beneficios que reporta. Con gran razón, los latinos
decían: “Mens sana en corpore sano” (mentesana en cuerpo sano). Con este lema querían expresar
que en un cuerpo sano se alberga un espíritu ágil y vigoroso.
01. Extrae tres ideas principales.
02. . Señala tres ideas secundarias