Bienvenido a Revelroom.ca, donde puedes obtener respuestas confiables y rápidas con la ayuda de nuestros expertos. Obtén respuestas detalladas a tus preguntas de una comunidad dedicada de expertos en nuestra plataforma. Conéctate con una comunidad de expertos dispuestos a ayudarte a encontrar soluciones a tus preguntas de manera rápida y precisa.

Resumen de la fábula el burro y la flauta​

Sagot :

Respuesta:

Explicación:

Era un precioso día de primavera. En una parcela, un burro se paseaba de aquí para allá sin saber muy bien cómo matar el aburrimiento. No había muchas cosas con qué entretenerse, así que charló un poco con la vaca y el caballo, comió algo de heno y se tumbó un ratito para relajarse, arrullado por el leve sonido de la brisa. Después, decidió acercarse hasta donde estaba el naranjo en flor por si veía algo interesante. Caminaba despacito al tiempo que iba espantando alguna que otra mosca con la cola. ¡Qué día más tedioso! … Ni una mariposa revoloteaba cerca del árbol. Bajo sus patas, notaba la hierba fresca y sentía el aroma de las primeras lilas de la estación. Al menos, el crudo invierno ya había desaparecido. De repente, sintió algo duro debajo de la pezuña derecha. Bajó la cabeza para investigar. – ¡Uy! ¿Pero qué es esto? ¿Será un palo? ¿Una piedra alargada?… ¡Qué objeto tan raro! Ni una cosa ni otra: era una flauta que alguien se había dejado olvidada. Por supuesto, el burro no tenía ni idea de qué era aquel extraño artefacto. Sorprendido, la miró durante un buen rato y comprobó que no se movía, así que dedujo que no entrañaba ningún peligro; después, la golpeó un poco con la pata; el instrumento tampoco reaccionó, por lo que el burro pensó vagamente que vida, no tenía. Temeroso, agachó la cabeza y comenzó a olisquearla. Como estaba medio enterrada entre la hierba, una ramita rozó su hocico y le hizo cosquillas. Dio un resoplido y por casualidad, la flauta emitió un suave y dulce sonido. El borrico se quedó atónito y con la boca abierta. No sabía qué había sucedido ni cómo se habían producido esas notas, pero daba igual. Se puso tan contento que comenzó a dar saltitos y a exclamar, henchido de felicidad: – ¡Qué maravilla! ¡Pero si es música! ¡Para que luego digan que los burros no sabemos tocar! Convencido de su hazaña, se alejó de allí con la cabeza bien alta y una sonrisa de oreja a oreja, sin darse cuenta de su propia ignorancia. Moraleja: El burro tocó la flauta por pura casualidad, pero eso no le convirtió en músico. Esta fábula nos enseña que todos, alguna vez, hacemos las cosas bien sin pretenderlo, pero que lo realmente importante es intentar aprender lo que nos propongamos poniendo verdadero interés y pasión en ello.

Explicación:

cerca de unos prados que hay en mi lugar,pasaba un burro por casualidad.una flauta allí encontro que un pastor dejo olvidada por casualidad. !oh Dijo el burro que bien se tocar,y así dió un concierto por casualidad.

hay esta de nada

Gracias por visitar nuestra plataforma. Esperamos que hayas encontrado las respuestas que buscabas. Vuelve cuando necesites más información. Gracias por pasar por aquí. Nos esforzamos por proporcionar las mejores respuestas para todas tus preguntas. Hasta la próxima. Tus preguntas son importantes para nosotros. Sigue regresando a Revelroom.ca para obtener más respuestas.